Procesos de impresión 3D
Los procesos de impresión 3D vienen revolucionando el mundo del diseño de producto, así como otras disciplinas como la medicina, la arquitectura… desde hace tiempo. El porqué de la importancia de este hecho lo encontramos en las utilidades en general de los procesos de impresión 3D y en particular, los nuevos campos para utilizar esta tecnología que se nos presentan para los diseñadores.
¿Qué son los procesos de impresión 3D?
Los procesos de impresión 3D son sistemas de creación de figuras sólidas en tres dimensiones a partir de datos volcados desde programas de diseño asistido por ordenador (CAD).
Las figuras que creamos en un entorno CAD son impresas fielmente transformando el volumen que creamos en el ordenador en una pieza real y tangible.
Fuente: Somos DI
¿Qué son los procesos de impresión 3D?
Los procesos de impresión 3D son sistemas de creación de figuras sólidas en tres dimensiones a partir de datos volcados desde programas de diseño asistido por ordenador (CAD).
Las figuras que creamos en un entorno CAD son impresas fielmente transformando el volumen que creamos en el ordenador en una pieza real y tangible.
¿Cómo funciona una impresora 3D?
Hay una gran diversidad de tipos de impresión 3D. Sin embargo, todos los procesos comparten una característica común: el objeto se imprime capa a capa, empezando por la inferior y acabando en la superior, siguiendo el modelo del archivo CAD previamente creado en la computadora.
¿Cuáles son las ventajas y desventajas de los procesos de impresión 3D?
Las piezas creadas a partir de los procesos de impresión 3D se realizan de forma rápida y precisa. Además son relativamente baratas, comparando el coste de realización de esa misma pieza mediante otros procesos de fabricación.
Según el tipo de proceso de fabricación 3D las tolerancias de las piezas fabricadas pueden ser más estrechas o menos, llegándose a alcanzar reproducciones muy precisas del modelo a realizar.
Las piezas fabricadas suelen tener unas propiedades mecánicas medias o bajas. Sólo algunos sistemas avanzados de impresión en 3D pueden fabricar piezas que desempeñen un trabajo de responsabilidad técnica, aunque cada vez se avanza más en este ámbito.
Las piezas creadas mediante estos sistemas se realizan ‘una a una’, por lo que no es productivo emplearlas para grandes tiradas. Son útiles para aplicaciones en las que creamos una o muy pocas piezas ya que es más fácil que hacerlas a mano y en el caso de fabricación de varias piezas, es innecesaria la fabricación de moldes.
¿Qué utilidad tienen para el proceso de diseño?
Dada la citada posibilidad de que los procesos de impresión 3D realizan piezas una a una de forma rápida, muy precisa y relativamente económica, la principal ventaja que se presenta para los profesionales del diseño de producto es la de crear maquetas o prototipos de sus creaciones que de otra forma habrían de realizarse por procesos tradicionales, normalmente a mano. Esto se denomina “Prototipado rápido” o en inglés “Rapid Prototyping”, disciplina en la cual, las impresoras 3D son la principal herramienta.
Durante todas las etapas del proceso de diseño las maquetas son imprescindibles para comprobar de manera tangible que un producto cumple con las especificaciones de diseño, que el diseño no presenta fallos…
